martes, 30 de enero de 2007

sombra de actriz

1 comentario:

Anónimo dijo...

La relación con lo divino penetra la relación con los hombres y coincide con la justicia social... la responsabilidad personal del hombre hacia su prójimo es tal que ni Dios puede anularla... El mal no es un principio místico que sea posible borrar mediante rituales; el mal es una ofensa que el hombre inflige al hombre. Nadie, ni siquiera Dios, puede tomar el lugar de la víctima... Entre hombres, cada cual responde por las faltas del Otro...
Levinas, De otro modo de ser o más alla de la esencia.