jueves, 31 de mayo de 2007

nada

mientras que dos hombres con batas de médico la envuelven con vendas hechas de gasa de abajo para arriba con todo y la silla de ruedas: Aquí habla Electra. En el corazón de la oscuridad. Bajo el sol del suplicio. En las metrópolis del mundo. En nombre de las víctimas. Expulso todo el semen que he recibido. Convierto la leche de mis pechos en veneno mortal. Revoco el mundo que he parido. Asfixio entre mis muslos al mundo que he parido. Lo entierro en mis vergüenzas. ¡Abajo la alegría de la sumisión! Vivan el odio, el desprecio, la rebelión, la muerte. Cuando ella pase a través de sus habitaciones con cuchillos de carniceros, ustedes conocerán la verdad.
Los hombres salen. Ofelia se queda en el escenario, inmóvil en el envoltorio blanco.
Heiner Müller

1 comentario:

Anónimo dijo...

He roto detrás de mí con todo lo que llamaba
Mi patria Ahora detrás de nosotros mi exilio
Con estas mis manos humanas Ah
Si yo hubiese seguido siendo el animal que fui
Antes de que un hombre me convirtiera en mujer
Medea la bárbara Ahora despreciada
Con estas mis manos de bárbara Las manos
Agrietadas desgarradas consumidas
Quiero romper la humanidad en dos partes
Y vivir en el vacío que queda en medio Yo
Ni mujer ni hombre Qué gritan Peor que la muerte
Es la vejez Besarían la mano
Que les regala la muerte si conocieran la vida
Esto era Corinto Quiénes son ustedes Quién los ha
Vestido con los cuerpos de mis hijos
Qué animal se esconde en sus ojos
Fingen estar muertos No engañarán a su madre
Son actores mentirosos y traidores
Morada de perros ratas serpientes
Me ladran chillan chillan lo oigo bien
Oh soy sabia Soy Medea Yo
No les queda sangre ya Ahora todo está tranquilo
Los gritos de la cólquide han enmudecido
Y nada más

Jason: Medea

Medea: Nodriza Conoces a este hombre